Un estudio muestra el protagonismo que han cobrado los “mejores amigos del hombre” en una jornada que originalmente ensalzaba a los “enamorados” y con el tiempo incorporó a los “amigos”.
La web especializada en mascotas “Halo con César Millán”, el televisivo educador y entrenador de perros latino que les “susurra” las órdenes, realizó un estudio con 3,000 “padres” de mascotas de todo el país para conocer cómo celebran San Valentín, cuyos resultados pueden dejar a muchos boquiabiertos.
Entre las mujeres no casadas que Halo encuestó el porcentaje de las que el 14 de febrero prefieren la compañía de canes a la de seres humanos trepa hasta el 39% y entre los hombres no casados es del 23%, en ambos casos por encima del 20% de la muestra general.
El estudio muestra el protagonismo que han cobrado los “mejores amigos del hombre” en una jornada que originalmente ensalzaba a los “enamorados” y con el tiempo incorporó a los “amigos”.
Después, los perros y gatos se fueron metiendo poco a poco en una fiesta siempre cargada de espíritu comercial, pues nos enseña que por estas fechas al “amor” hay que mimarlo con regalos y un trato “especial”.
San Valentín, patrón de gastadores
Los estadounidenses han aprendido bien la lección y gastan a manos llenas por San Valentín.
Ese año desembolsarán un promedio de US $165 por persona, lo que hace un total de US $21,800 millones, según la Federación Nacional de Comerciantes al Detalle (NRF).
Tan abultada cifra corresponde solo al gasto del 52% de los adultos estadounidenses que celebran San Valentín. El 48% restante no presta atención a la fiesta que tiene como símbolos los corazones rojos y las figuras de Cupido.
Es la primera gran campaña del año para los comerciantes estadounidenses, a la que seguirá en marzo San Patricio, una fiesta irlandesa que se ha hecho internacional.
El COVID-19 no le es ajena a San Valentín. El gasto promedio per cápita es US $32 menor que en el 2020, cuando superó los US $196, y planes clásicos de pareja como cenar en restaurantes y asistir a espectáculos o bailes están sujetos a restricciones, por lo que la frase “no hay lugar como el hogar” está muy de moda este año.
Huesos y galletas en lugar de flores y bombones
Las mascotas en este sentido son mucho más fáciles de contentar. No comen fuera de casa, no gustan de musicales y en su inmensa mayoría no bailan.
Aunque esas costumbres no están entre las razones por las que los encuestados por Halo dicen amar a sus perros.
El 71% dice que su perro le impulsa a querer disfrutar más de la vida, un 64% dice que le enseña a ser paciente y un 65% que aprende con él a ser más cariñoso como persona.
Entre los solteros hay quienes afirman que les sirven para conseguir citas con otras personas, pero son una minoría (un 7% de las solteras y un 18% de los solteros).
Son porcentajes muy por debajo de los que aman a sus perros por como son. El 64% de las mujeres dice que su perro le hace sentir ganas de ir a casa y el 86% de los hombres afirma que su mascota le hace sentir a gusto.
Para el 60% de los propietarios o “padres” de perros, como los define Halo, la mejor manera de celebrar San Valentín con ellos es tratarlos de una manera especial.
En segundo lugar, con un 49% de menciones, está el decirles “te amo”, en tercero (36%) comprarle o hacerles un regalo, en cuarto (30%) colgar fotos del perro en las redes sociales junto con mensajes de amor y en quinto (25%) llevarlo a alguna actividad de San Valentín para animales, que cada vez son más comunes.
Locos por los perros
Los perros no solo nos hace mejores como personas, dice “Halo con César Millán”. También nos hacen más atractivos para otros humanos.
Un 59% de los hombres y un 64% de las mujeres consideran atractivo que una persona sea “padre” o “madre” de un can. Si además tratan a su mascota como si fuera un miembro de su familia concitan el interés de 54% de los hombres y el 68% de las mujeres.
De todos los estados del país California es en el que hay más amor por los perros, seguido de Nueva York, Washington, Tennessee, Florida, Massachusetts, Texas, Missouri, Ohio y Arizona.
Aunque esa predilección por los canes está extendida por todos lados, como demuestra el hecho de que al menos una vez al mes el 86% de los estadounidenses le diga “te amo” a su perro, un 73% le compre un regalo y un 68% le permita dormir en su cama.
En los californianos los porcentajes son 92% para el primer caso, 98% para el segundo y 80% para el tercero.