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Gary Davenport

ADM

Los fabricantes de alimentos para mascotas que buscan una fuente de fibra para alimentos y premios deben considerar a la cascarilla de soya. Existe una gran disponibilidad de cascarilla de soya tostada y molida derivada del proceso de extracción del aceite de soya. La cascarilla de soya es económica teniendo en cuenta que su precio es generalmente 8 a 10 veces más bajo que las fuentes de fibra comunes como la pulpa de remolacha. A pesar de su bajo costo, raramente es utilizada en productos para mascotas debido a la percepción negativa del consumidor. Esta percepción se basa en la suposición de que es un ingrediente de bajo costo, inerte y que se usa como relleno y que no proporciona ningún valor nutricional para perros o gatos. Sin embargo, contrariamente a la percepción de los consumidores, hallazgos recientes derivados de varias investigaciones han encontrado que la cascarilla de soya es nutricionalmente equivalente a la pulpa de remolacha cuando es utilizada en dietas nutricionalmente completas de perros y gatos.

Perros adultos alimentados con un alimento extrudizado que contenía 15% de cascarilla de soya produjeron heces y valores de digestibilidad de nutrientes que fueron similares a un alimento que contenía 16% de pulpa de remolacha pero diferentes a un alimento con 10% de celulosa. La cascarilla de soya y la pulpa de remolacha obtuvieron perfiles similares de productos finales fermentados, lo cual indicó fermentaciones comparables a nivel intestinal para ambas fuentes de fibra cuando fue consumida por los perros. Un estudio con gatos adultos también mostró suficiente capacidad fermentativa que permite a los gatos utilizar alimentos con 14% de cascarilla de soya o 15% de pulpa de remolacha comparado con un alimento que contenía 10% de celulosa. Como carnívoros obligados, los gatos son generalmente más limitados en su capacidad para usar fibra dietética. Sin embargo, los resultados del estudio mostraron una calidad de heces comparable así como digestibilidad de nutrientes y productos finales fermentativos fecales similares para la cascarilla de soya y la pulpa de remolacha cuando se utiliza como fuentes de fibra en alimentos extrudizados para gatos.

La capacidad de los perros y gatos para utilizar la cascarilla de soya y la pulpa de remolacha está ligada a la composición de fibras y a la capacidad de fermentación del intestino grueso. Ambas fuentes de fibra contienen niveles similares de fibra dietética, siendo la pulpa de remolacha quien contiene más fibra soluble. A pesar de las diferencias en el contenido de fibra soluble, la cascarilla de soya y la pulpa de remolacha son fermentados igualmente por la microbiota intestinal. La pulpa de remolacha se clasifica como una fibra moderadamente fermentable y es generalmente considera como la fuente de fibra ideal de alimentos para mascotas. Por lo tanto, las similitudes observadas en los valores nutricionales para la cascarilla de soya y la pulpa de remolacha implican que la fibra funcional de la cascarilla de soya proporciona los mismos beneficios de salud nutricional que la pulpa de remolacha.

Los fabricantes de alimentos para mascotas se enfrentan continuamente a reconocer y cubrir las expectativas de los consumidores sobre los ingredientes utilizados en alimentos para mascotas. Desafortunadamente, estas expectativas pueden basarse en información errónea y malentendidos que pueden remontarse hasta hace más de 25 años en el pasado.

La desinformación es un problema auto-inducido causado por campañas de mercadotecnia que crean puntos de diferenciación con productos que menosprecian el uso de ciertos ingredientes.

Estas campañas mencionan falsamente que la fibra es utilizada como un relleno no nutritivo en la formulación. Ingredientes que se conocen desde hace mucho tiempo por sus características nutritivas y apropiadas para perros y gatos continúan siendo falsa e injustamente criticados como inferiores o problemáticos. Como resultado, los fabricantes deben identificar ingredientes alternativos no tradicionales que cumplan con las necesidades cambiantes del mercado y las expectativas de los consumidores. Si bien estos ingredientes no tradicionales pueden ser populares y de moda para los propietarios de mascotas actuales, muchos no son soportados con datos científicos de estudios de investigación bien controlados con perros o gatos. Los resultados de estudios comparativos de alimentación claramente refutan la idea errónea de que la cascarilla de soya es inerte y no nutritiva. La cascarilla de soya contiene fibra funcional que es fermentada por la microbiota intestinal para proporcionar beneficios nutricionales de salud comparables a la pulpa de remolacha, que representa la fibra ideal en alimentos para mascotas. Estos hallazgos deben ser aprovechados para corregir los conceptos erróneos, a la vez que se educa a los consumidores sobre el valor nutricional de la cascarilla de soya para perros y gatos. La cascarilla de soya debe ser considerada por los fabricantes de alimento para mascotas cuando buscan un ingrediente alternativo para reducir los costos de formulación a la vez que se mantiene la calidad nutricional de sus productos. Contrariamente a la percepción pública, la investigación demuestra que la cascarilla de soya, como la pulpa de remolacha, proporciona los beneficios de salud nutricional deseados por los dueños de perros y gatos. La cascarilla de soya es un gran ejemplo de que la percepción no siempre es la realidad cuando se considera el valor nutricional de los ingredientes para perros y gatos. Tal vez estos resultados de investigación representan el comienzo de un nuevo paradigma en el que la cascarilla de soya se convierta en el nuevo la nueva opción de fibra ideal.