La fabricación de alimentos para perros y gatos es un proceso riguroso que pasa por múltiples factores. Dado que el bienestar y la salud de los animales de compañía depende de ello, la producción de la gama de alimentación Veterinary HPM de Virbac cumple las mismas normas sanitarias que la alimentación humana.

Así lo explica en un vídeo, Philippe Domptail, director de la planta de fabricación de Virbac Nutrición, quien destaca que la producción de la alimentación de la compañía de salud animal es un proceso riguroso y seguro. En este sentido, el director explica como es importante que cada etapa de la producción se realice correctamente para garantizar la seguridad de los alimentos, su calidad y la conservación de su valor nutricional.

Domptail comienza señalando que es un proceso que comienza con la definición de los parámetros de preparación, de peso y de cocción de los ingredientes, así como de la forma y el tamaño de las croquetas.

Después de ello, pasan a la producción de una ‘unidad piloto’ que se analiza a detalle y que, a continuación, se someterá a la validación de los propietarios de perros y gatos, antes de desplegarse a mayor escala.

“Se trata de un proceso muy riguroso que pasa por varios controles para garantizar la conservación del valor nutricional y de la calidad de los alimentos de principio a fin, hasta el embolsado”, remarca el experto.

Asimismo, apunta que el proceso es fruto de la colaboración de una cadena humana en la cual cada eslabón es importante. Hay operarios de producción, responsables de la preparación, un nutricionista veterinario, un equipo de control de calidad…

“Somos un pequeño equipo de unas sesenta personas, todas muy comprometidas y experimentadas. Algunos llevan más de 30 años en esta empresa”, recuerda el director de la planta de fabricación, quien remarca que, en cuanto al nivel de seguridad alimentaria, las normas sanitarias son exactamente las mismas que para el hombre. “Además, hay muchos integrantes de nuestro equipo que vienen del sector de la alimentación humana, como yo mismo”, señala.

Asimismo, su método de trabajo permite controlar los riesgos importantes sobre la seguridad de los alimentos, ya que implica controles en todas las fases. Aparte de los autocontroles que se llevan a cabo en los puestos de trabajo, Virbac realiza unos 25.000 análisis de laboratorio al año.

Una planta de fabricación certificada.

La planta de fabricación en la Camarga francesa de Virbac cuenta con la certificación ISO 9001, que es un sistema de gestión de la calidad con indicadores que permiten trabajar con una mejora continua.

El proceso de producción está supervisado de principio a fin por un responsable control de calidad interno y sometido periódicamente a la validación de las autoridades externas competentes.

“Somos también miembros de organismos franceses y europeos de referencia lo que garantiza la implementación de buenas prácticas”, enfatiza el director de la planta.

Por último, Domptail comparte 3 ideas que a su juicio son clave. En primer lugar, realizan la misma seguridad alimentaria que para el hombre. En segundo lugar, destaca que es un equipo relativamente pequeño, en el que cada individuo está valorado, comprometido y experto, desde hace más de 30 años. Por último, subraya que es una planta de fabricación con la certificación ISP 9001.