El recubrimiento del alimento para perros y gatos es un proceso clave en la producción de alimentos para mascotas, cuyo objetivo principal es mejorar la energía y el valor nutricional. Esto es especialmente importante cuando las formulaciones incluyen cereales u otros ingredientes de bajo contenido energético. Los aceites y grasas, tanto de origen animal como vegetal, se utilizan comúnmente para cumplir con los requisitos energéticos específicos indicados en las etiquetas de los alimentos para mascotas. Además de proporcionar energía, los recubrimientos con aceites cumplen varias funciones: mejoran la palatabilidad, aportan ácidos grasos esenciales y optimizan la textura del pienso.
Aunque algunas grasas se añaden durante las etapas de mezclado o acondicionamiento antes de la extrusión, un exceso de líquidos en esta fase puede comprometer la estructura del alimento y reducir la calidad general del producto. Por esta razón, la mayoría de los lípidos se incorporan después de que el alimento ha sido extruido y secado, pero antes de la fase de enfriamiento.
La palatabilidad de los alimentos para mascotas—particularmente para los gatos—es un factor crítico para los fabricantes. Los dueños de mascotas son mucho más propensos a volver a comprar una marca si sus animales disfrutan de la comida. Por lo tanto, aunque los ingredientes de alta calidad son importantes, la tecnología detrás del proceso de producción también juega un papel fundamental. El recubrimiento uniforme del alimento es esencial para garantizar un sabor consistente en cada croqueta, lo que mejora la experiencia alimenticia de las mascotas. Además, los recubrimientos con aceite ayudan a preservar el alimento, protegiéndolo del deterioro. Conseguir un color uniforme también es crucial; la absorción desigual de aceite puede hacer que algunas croquetas se vean más oscuras, lo que puede dar una impresión de menor calidad.
Una tecnología destacada en este ámbito es el “Continuous Paddle Coater” de PLP Systems. Esta solución avanzada de recubrimiento está diseñada para un manejo suave de las croquetas, utilizando un sistema continuo de doble eje con paletas. Garantiza una dosificación precisa y un ajuste automático del tiempo de retención, lo que es fundamental para obtener resultados consistentes y de alta calidad. Los atomizadores SMOG montados en la parte superior permiten una distribución impecable de los aceites, posibilitando aplicaciones en etapas y microinclusiones desde tan solo 0,01%. Además, soporta adiciones de hasta un 15% de aceite, manteniendo una excelente homogeneidad y altos estándares de Coeficiente de Variación (CoV), asegurando un acabado uniforme y de alta calidad en cada croqueta.
