Típicamente, se usan grasas en alimento para mascotas por su mejora en la palatabilidad del alimento, sin embargo, es bien sabido que sus beneficios van más allá.
Julieta Sierra Díaz
Las grasas tienen muchas funciones:
- Fuente de energía.
- Vehículo de vitaminas liposolubles (A,D, E y K).
- Mantenimiento de la integridad de las membranas celulares.
- Formación de hormonas.
- Todo esto implica una mejor salud para la mascota, que normalmente se evidencia en el pelaje, la piel, la actividad y la inteligencia de las mascotas.
- Se debe cuidar siempre un balance entre grasas saturadas e insaturadas, teniendo en cuenta que en el alimento de mascotas se usan principalmente grasas de origen animal, por su perfil de ácidos grasos y por su alta palatabilidad, comparando con grasas de origen vegetal.
- Los ácidos grasos esenciales para la mayoría de las especies animales son:
- Linolénico: ayuda a mantener sla salud de la piel, el pelo y el cerebro (cognición). Están presentes en algunos aceites vegetales y grasa de pollo.
- Araquidónico: favorece el mantenimiento de la estructura de las membranas celulares del sistema nervioso. Normalmente es aportado por grasas de origen animal (cerdo, ave, bovino).
- Eicosapentanoico (EPA): es un precursor de compuestos antinflamatorios, permite mantener la calidad espermática, el desarrollo del cerebro y del sistema cardiovascular. Se encuentra en grasas de origen de animales marinos (peces, moluscos, etc.).
- Docosahexaenoico: promueve el desarrollo de la masa encefálica, las habilidades motrices y la cognición. Se pueden obtener de las grasas de origen de animales marinos, algas y linaza.
- Estos ácidos grasos son poliinsaturados, es decir, que poseen espacios en su estructura química que permiten la unión de radicales libres, lo que puede generar una rápida oxidación, generando rancidez, que a su vez genera estrés oxidativo y como consecuencia, muerte celular acelerada.
- Se vuelve relevante, entonces, asegurar la calidad de las grasas y aceites que se usarán en el alimento de mascotas.
- Existen parámetros medibles en la calidad de las grasas y aceites que permiten determinar el nivel de degradación que poseen, sin embargo, no basta un único parámetro, ya que los resultados pueden no explicar los cambios en forma individual.
- Esto se debe a que los productos derivados de la peroxidación son múltiples y van cambiando a través del tiempo, como se observa en el gráfico 1.

- Gráfico 1. Producción y degradación simultánea de varios productos de peroxidación a través del tiempo. +
+ Adaptado de Shurson, et al., 2015
Es importante observar en este gráfico que la medición de peróxidos, por sí misma, no puede ofrecer un valor confiable del nivel de degradación de la grasa, ya que los peróxidos son bajos al inicio del proceso de degradación, aumentan a las pocas horas pero posteriormente vuelven a bajar hasta desaparecer, misma situación ocurre con los aldehídos. En el caso de los polímeros y los ácidos, pudiera subestimar el valor de peroxidación según el momento en que se haga la medición, es por eso que la recomendación es contar o desarrollar al menos dos o tres diferentes tipos de análisis que permitan determinar con mayor precisión la degradación de la grasa.
¿Qué es el estrés oxidativo?
Es el resultado del desequilibrio provocado por un exceso de radicales libres que no pueden ser neutralizados por el metabolismo.
El estrés oxidativo metabólico ocurre cuando los prooxidantes rebasan la capacidad antioxidante de un animal. Por lo tanto, los animales con un suministro inadecuado de antioxidantes endógenos (producidos por el propio cuerpo) en relación con la demanda metabólica, pueden desarrollar estrés oxidativo metabólico.
Los antioxidantes exógenos (por ejemplo, vitamina E, vitamina A, vitamina C) y endógenos (por ejemplo, glutatión, vitamina C) inhiben la producción de especies reactivas de oxígeno. Sin embargo, las vitaminas adicionadas en el alimento no deberían estar destinadas a proteger a la mascota del estrés oxidativo, sino a cubrir otras demandas metabólicas que permitan mantener su salud, es decir, se convierten en un antioxidante muy costoso.
Existe evidencia científica de que las dietas que contienen grasas peroxidados dañan la salud de los animales, aumentan el estrés oxidativo, reducen la digestibilidad de los alimentos, disminuyen la longevidad, deterioran la función inmune y la calidad de vida de las mascotas.
¿Cómo podemos hacer la valoración de la calidad de las grasas?
Si bien es cierto que se deben considerar muchos factores para determinar la calidad de la grasa, existen puntos críticos a revisar para su uso en el alimento de las mascotas:
- Calidad química intrínseca: grado de humedad, impurezas, insaponificables, ácidos grasos libres, peróxidos, fracción no eluible, polímeros de ácidos grasos, sustancias extrañas, tóxicos, etc. Como ya se mencionó, un solo análisis no es un indicador de la calidad, se debe contar con más de uno para poder determinar que la grasa es óptima para el consumo de las mascotas (Cuadro 1).

- Composición y valor nutricional: esto pocas veces es atendido por la dificultad analítica que representa, porque no es sencillo medir el contenido en energía, el porcentaje de triglicéridos, la composición en ácidos grasos o la riqueza en ácidos grasos esenciales. Sin embargo, existen cuadros nutricionales que pueden auxiliar al nutricionista para considerar estos factores.
- Precio ofertado: una grasa con un precio bajo debe ser puesta bajo la lupa, porque puede ser un producto deteriorado, aunque físicamente no lo parezca.

Cuadro 2. Niveles promedio de acidez y peróxidos en diferentes tipos de grasas. +
Esto evidencia la importancia de contar con varios análisis, pues como se observa, no existe una correlación entre la acidez y el índice de peróxidos.
Puntos a considerar.
- Tradicionalmente, se ha asumido que el índice de peróxidos y los ensayos de sustancias reactivas con ácido tiobarbitúrico son indicadores fiables del grado de peroxidación de lípidos en grasas y aceites para alimentación animal. Sin embargo, recientes revisiones y estudios indican que el uso de PV o TBARS como indicadores únicos no caracterizan adecuadamente el grado de peroxidación de lípidos y pueden proporcionar resultados irreales.
- El perfil de ácidos grasos de los lípidos y las condiciones peroxidativas a las que se exponen (por ejemplo, la temperatura y la duración de almacenamiento o procesamiento) son importantes al seleccionar un ensayo indicativo.
- Por lo tanto, se recomienda el uso de combinaciones de ensayos que midan compuestos en diferentes etapas de peroxidación para proporcionar una evaluación más precisa de la degradación de los lípidos y determinar los umbrales dietéticos de los compuestos de peroxidación en los que se daña la salud.
- Aunque se ha demostrado que la adición de algunos antioxidantes dietéticos ayuda a disminuir el efecto de la peroxidación de las grasas, es necesario definir el tipo de antioxidante y las condiciones de peroxidación dietética donde son beneficiosos.
- Lo ideal es lograr la estandarización de las grasas que se usan en la ración a través de una interacción y validación con el proveedor.
Bibliografía.
Hanson, A.R., Urriola, P.E., Wang, L., Johnston, L.J., Chen, C., Shurson, G.C. 2016. Dietary peroxidized maize oil affects the growth performance and antioxidant status of nursery pigs. Anim. Feed Sci. Technol. 216:251-261
Kerr, B.J., T.A. Kellner, and G.C. Shurson. 2015. Characteristics of lipids and their feeding value in swine diets. J. Anim. Sci. Biotechnol. 6:30.
Lindblom, S.C., Gabler, N.K., Dilger, R.N., Olson, Z.F., Loving, C.L, Kerr, B.J.. 2018. Influence of feeding thermally peroxidized soybean oil on oxidative status in growing pigs. J. Anim. Sci. 96:545–557.
Masson S, L.. CONTROL DE CALIDAD DE INSUMOS Y DIETAS ACUÍCOLAS, 1994. FAO. Depto. Ciencias de loa Alimentos y Tecnología Química. Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas
Universidad de Chile.
Semple, L. Fundamental and functional uses for fats and oils in pet nutrition. 2021. Pet Food Processing.
Shurson, G.C, B.J. Kerr, and A.R. Hanson. 2015. Evaluating the quality of feed fats and oils and their effects on pig growth performance. J. Anim. Sci. Biotechnol. 6:10.